Uno de los objetivos de nuestro proyecto pretendía, entre otros aspectos, integrar aplicaciones educativas en la práctica docente. En este sentido, las aplicaciones son una parte esencial del aula del siglo XXI y proporcionan muchas oportunidades para un pensamiento de alto nivel en las aulas.
Uno de nuestros profesores ha descubierto durante su formación algunas de las aplicaciones educativas más populares y prácticas para la enseñanza y el aprendizaje de los estudiantes en una gama más amplia de materias. Igualmente, también ha trabajado el concepto de “destrucción de aplicaciones” y cómo puede mejorar la enseñanza y el aprendizaje de los estudiantes.
Los objetivos del curso fueron:
• Usar diferentes aplicaciones educativas en clase, brindando a los estudiantes el mejor aprendizaje experiencia.
• Adquirir una visión general de las muchas posibilidades educativas del uso de aplicaciones educativas y la dimensión motivacional aportada al aula al utilizarlos.
• Ser capaz de elegir los más adecuados según las necesidades de los estudiantes.
• Manejar con soltura aplicaciones de redes sociales, juegos y cuestionarios.
• Fomentar la creatividad de los estudiantes y mejorar las técnicas de estudio utilizando aplicaciones.
• Utilizar aplicaciones para estructurar la información, para analizar, comprender, sintetizar, recordar y generar nuevas ideas.