El pasado viernes 27 de abril, y dentro de las II Jornadas del Deporte y la Salud enmarcadas en el Proyecto “Promoción de Conductas Saludables entre los Adolescentes”, los alumnos de FP Básica, 3º ESO “E”, 3º ESO “B” y 3º PMAR, acudían a una charla de la que únicamente conocían que se titulaba “El baile maldito, repara el daño”. Por más que los alumnos preguntaban de qué iba a ir dicha charla con actuación previa, el profesor organizador de la misma, Juan Enrique Bernal, no les quiso desvelar ningún detalle, y solamente les adelantó “que les iba a impactar”.
Y así fue. Tanta expectación se generó que los alumnos mostraban su impaciencia por saber qué era lo que iban a presenciar.
Al aparecer en escena los protagonistas se hizo un silencio sepulcral en la Sala de Usos Múltiples del Musax, pues los alumnos comenzaban a quedar impactaos desde el minuto cero. Únicamente unos suaves murmullos de asombro se dejaban oir.
Tras unas breves pero sentidas palabras de presentación, primero de Juan Enrique y después de Lucía Muñoz, monitora de baile y voluntaria de Capellanía Católica, comenzó la actuación de 8 internos con el rostro oculto por caretas anónimas pero que alegóricamente representaban las distintas drogas que atrapan, hasta succionarlo, a todo el que se mete en ellas. Esta representación coreográfica ya dejó bastante huella entre los alumnos pues el mensaje que transmitió fue evidente e impactante.
Pero si este espectáculo representado por los 8 internos que se encuentran en tercer grado penitenciario, acompañados en esta ocasión por la monitora Lucía Muñoz que hacía las veces del noveno interno que no pudo actuar por lesión, tras unas palabras de la funcionaria de prisiones Encarna Coll, lo más desgarrador por la profundidad del mensaje estaba por llegar. Efectivamente, a continuación, cada uno de estos protagonistas, con el corazón en la mano y con la sana intención de concienciar a nuestro alumnado, fueron exponiendo sus testimonios de vida. Entre otras cosas, comentaron cómo por entrar en el mundo de la droga tuvieron que cometer robos y otras fechorías, y cómo todo eso afectó a sus vidas y a las de sus familias, y cómo tuvieron que ver crecer a sus hijos desde una angustiosa distancia. También hablaron del daño que hacen las malas compañías y sobre todo del error tan grave que se comete cuando te dejas llevar y no eres capaz de negarte de forma firme y categórica ante el ofrecimiento de estupefacientes. Todos y cada uno de los internos intervinientes insistieron de forma enérgica y fehaciente a los alumnos, que no arruinaran sus vidas y que no cayeran en las redes de la droga que te enredad de tal manera que resulta muy difícil salir de ellas.
Después del testimonio de los internos, intervino el Jefe de Servicio del Centro Penitenciario de Murcia 1 (Sangonera la Verde), Antonio Jávega Jiménez, que con una oratoria muy directa y convincente, vino a decir a los alumnos que eran unos auténticos privilegiados porque si bien el mensaje de “no a las drogas” nos viene por distintos medios profesionales y sociales, ninguno es tan elocuente y real como el que dan las personas que han pasado por ahí y que aún siguen sufriendo las consecuencias de sus errores. Y añadió que era más que probable en ese día estuvieran recibiendo la mejor clase de su vida por lo que les puede hacer reflexionar y evitar tomar caminos tortuosos, ruinosos y lamentables.
Igualmente, intervino el funcionario Pedro Torres que explicó cómo se desarrollaba la vida diaria de estos internos durante su internamiento, haciendo ver a los alumnos que no era nada agradable para ellos por lo que supone vivir alejados de la sociedad y de la familia.
Para finalizar el acto, los alumnos, aunque remisos al principio por el impacto que les había producido el desarrollo de la charla, se fueron animando a realizar preguntas que fueron contestadas muy amablemente por cada uno de los protagonistas.
En definitiva, todos, profesores y alumnos, asistimos a una lección magistral de vida ofrecida por estas personas. Y si el mensaje principal es que no hay que caer en las drogas, no debemos olvidar otros tan importantes como no aprobar la conducta de hipocresía que subyace en nuestra sociedad, porque es fundamental que todos creamos en la reinserción social de todas aquellas personas que ante variopintas circunstancias, cayeron un día en el abismo que supone el consumo o el tráfico de drogas.
Desde estas líneas, nuestro más sincero agradecimiento a la comitiva que nos vino del Centro Penitenciario y darles igualmente nuestra felicitación, tanto a los internos como a los funcionarios, por la extraordinaria labor social que están llevando a cabo, y como no, también nuestro más sentido agradecimiento a los profesores y alumnos que asistieron a este acto por su atención y por su respeto.
Juan Enrique Bernal González.
Coordinador del Proyecto “Promoción de Conductas Saludables entre los Adolescentes del IES Alfonso X El Sabio”.